Cuando te den de alta después de un parto vaginal, casi todo el dolor agudo habrá desaparecido. Al regresar a casa, no obstante, puedes experimentar cierto malestar. El área más molesta será el periné. Por muy fácil que haya sido el parto, esta parte del cuerpo fue sometida a un traumatismo y necesita tiempo para recuperarse.
Procura no despertarte por el molestar que sientes. Ten presente el increíble milagro que acaba de experimentar tu cuerpo. Además de tener que lidiar con las molestias físicas asociadas al puerperio, necesitas adaptarte a un nuevo estilo de vida: levantarte continuamente por la noche, cambiar pañales y alimentar al bebé.
Si tuviste una cesárea la estancia en el hospital es de 3 a 4 días, algo más larga que un parto vaginal. Te pondrán en una camilla inmediatamente después de la intervención y te llevarán a la sala de recuperación. Es posible que durante este recorrido puedas tener en brazos a tu bebé. Como ocurre después de cualquier intervención quirúrgica, los primeros días sentirás algunas molestias. Pero no te preocupes, porque la recuperación suele ser bastante rápida.
Bibliografía: Embarazo para dummies – Joanne Stone y Keith Eddleman.